Breve poema que invita a reflexionar acerca de la importancia de la vida en cualquier etapa, tomando como premisa el hecho de que la vida comienza desde el momento de la concepción. La verdadera libertad a la hora de decidir solo se da cuando se tiene plena conciencia del acto y se conocen a fondo sus consecuencias.
Una joven confundida,
indecisa y asustada.
Va a una clinica de aborto,
para ser "aconsejada".
Pues la pobre fue engañada,
Creyó que entregó su amor,
y ante el miedo y la "vergüenza",
pretende "enmendar" su error.
Le pregunta a los demás,
hasta quedar "convencida".
Lo que tiene en su interior,
"No es considerado una vida"
Y su novio le insistía,
no podemos arriesgarnos,
todavía eres muy joven,
nos estarías condenando.
Y pensando en su futuro,
que parece tan brillante,
un hijo en estos momentos,
Sería un problema gigante.
...
Mas en el fondo escucha,
A la voz de su conciencia
en sus entrañas percibe,
Gritos pidiendo clemencia
No escuches al hombre necio,
escucha a tu corazón,
dame una oportunidad,
para llenarte de amor.
No decidas con temor,
Pon tu confianza en Dios
No creas en falsas palabras,
Te ruego escuches mi voz.
Y la pobre confundida
¿Cómo puede decidir?
Si el mundo la acorrala,
no la deja discernir.
...
Al entrar al consultorio,
el doctor le da un abrazo,
"Esto no es más que una simple
interrupción del embarazo."
"Ya lo hemos hecho mil veces,
no te debes preocupar,
es más, si cierras los ojos,
mas rápido va a pasar."
Que convenientes palabras,
Disfrazadas por el hombre,
que no piensa en la persona,
Ni siquiera la conoce.
Duele ver a un ser humano,
con corazón endurecido,
que sacrifica a una vida,
por su ego empedernido.
...
Si tú supieras la verdad,
que no te dejan mirar,
porque a tu propio hijo,
están a punto de... matar.
...
No te dejes engañar,
solo por miedo a sufrir,
con la vida no se juega,
no hay "tal derecho a decidir."
Decide sobre tu cuerpo
Pero eso que llevas dentro
Es algo distinto a ti
Es sagrado y no es un cuento
Porque la vida comienza,
desde la concepción,
la biología, la ciencia
avalan dicha noción.
No es un puñado de células,
mucho menos un tumor,
No es una extremidad tuya,
Pues le late un corazón.
No busques justificar,
sólo porque sea legal,
recuerda que hay intereses,
desviados de la moral.
Te aseguro, no estás sola,
Si hay quien te quiere ayudar,
Existen asociaciones
Que te pueden apoyar
No condenes a ese niño,
que no puede ni opinar.
Llevas un milagro dentro
Que no debes rechazar.
...
Y respecto a las tragedias,
también pueden ocurrir,
abusos y violaciones,
¡qué dolor al decidir!
¿Pero acaso un veneno,
se debe de combatir,
aplicando otro veneno,
que conlleva a destruir?
No puedes privarle a alguien,
por más que sientas desprecio,
del regalo de la vida,
no está en ti decidir eso.
¿Pues qué culpa tiene el niño?
Él es víctima también.
Agregar un crimen más,
No te va a hacer sentir bien
Sólo agrega más dolor,
destrozando nueva vida,
En la desesperación,
Solo se abre mas la herida.
...
Cuando veas a tu pequeño,
y lo aceptes con amor,
Las heridas serán sanadas,
No habrá recriminación.
Y algún día entenderás,
que tú no eres su dueña.
Que Dios sólo te confió,
a esa criatura pequeña.
Y que fuiste bendecida,
Con ese Don de dar vida,
Para ser su protectora,
Su compañera y su guía.
...
Recuerda que el amor,
requiere sacrificio,
involucra aceptación,
entrega y servicio.
Y aún en el dado caso,
De no poder conservarlo,
Siempre habrá padres deseosos
Y dispuestos a adoptarlo.
...
La satisfacción en la vida,
no depende de lo que tengas,
ni de cuánto se te de.
Depende de cuánto aprendas,
y cuánto logres crecer.
Si algún día tú te encuentras,
En alguna situación,
Que atente contra una vida,
Te invito a la reflexión ...
Sólo acuérdate de ti,
Ten presente estás aquí,
Sólo porque un día tu madre
Decidió decir .... que SÍ.
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